El día 15 de agosto, conmemoramos la solemnidad litúrgica de la Asunción de la Virgen María en cuerpo y alma a los cielos. Venerado y profesado este misterio de la fe cristiana durante siglos, en 1950 el Papa Pío XII lo proclamó como dogma de fe.
Con motivo de esta celebración nos dice el Papa Francisco: “La fiesta de la Asunción de María es una llamada para todos, especialmente para cuantos están afligidos por dudas y tristezas, y viven con la mirada dirigida hacia abajo”.
Que María, Madre de Dios nos ayude y fortalezca para transitar este tiempo tan especial en oración y fraternidad derramando bendiciones sobre sus familias.